¿Qué motiva la creatividad?

¿Qué motiva la creatividad?

      Las motivaciones  que activan el desarrollo de la creatividad pueden ser originadas por agentes externos o internos. En el interior de la persona que crea siempre hay motivos que estimulan su pensamiento. Pero también, durante el proceso creativo, el individuo interactúa con el medio ambiente. Por lo tanto la creatividad surge de lo conflictos entre estos dos agentes.

      Según la teoría del espiral creativo el origen de la creatividad depende de tres aspectos como son la necesidad, el problema y el conflicto.

      La necesidad:

      Es lo que no puede evitarse, por hacerse imprescindible para algún fin. Las necesidades están siempre mucho más ligadas al mundo interno del sujeto porque la mayor parte de ellas, tanto corporales como espirituales, nacen desde este interior. Cubiertas las necesidades primarias de subsistencia: alimentación, seguridad y abrigo, el hombre comienza a sentir otras necesidades que son de orden espiritual: necesidad de  autorrealización y de aceptación en la sociedad. (MASLOW). Cualquiera sea el origen de la necesidad, el pensamiento creativo inicia el espiral en deseo de satisfacerla. El resultado de satisfacer una necesidad puede ser la creación de un producto tangible o intangible.

      El problema:

      Surge como una perturbación de equilibrio mental de la persona. Cuando aparece un problema es porque se advierte que la situación pensada como ideal, no coincide con la situación real actual, lo que desequilibra el orden interno. Aquí   también puede iniciarse el espiral creativo: el individuo se pone en movimiento para acercar ambos puntos distantes y hacer que la situación real se acerque a la ideal a fin de darle resolución a la problemática y por consiguiente, recuperar su equilibrio interior. También la resolución de un problema puede llevar a la creación de un producto.

      El conflicto:

      Un conflicto es una lucha de una o más partes que se contraponen, en las cuales cada una pretende conseguir un fin determinado, opuesto a otro o a los otros, el conflicto que puede iniciar el espiral creativo, es posible que no involucre a la propia persona, sino que este creativo ayude a resolver conflictos de otras personas u organizaciones, o que a resolución de conflicto este ligada a creación de un producto tangible.

      En la detección de problemas,  conflictos o necesidades, entran en juego rasgos como fineza de percepción, capacidad intuitiva, curiosidad intelectual, capacidad critica, curiosidad, el poder oírnos a nosotros mismos, receptividad, permeabilidad a la experiencia, ver y oír más allá de lo obvio, gusto por los problemas, sinergia interna, análisis, apertura mental, sensibilidad para los problemas, y redefinición.

Por: Raquel Paredes H.